Comibam Internacional

Entrevista personal al misionero o debriefing

\"debriefing\"

Por Dr. Carlos Pinto

Definición

El “debriefing” es un anglicismo que refiere a la práctica de reunirse con el misionero en retorno para darle la oportunidad de expresar sus pensamientos, sentimientos y las acciones que se dieron en el trabajo de campo, facilitando un proceso de significación, integración y cierre de la experiencia vivida. El debriefing o entrevista personal es una de las herramientas más importantes del cuidado del misionero.

Beneficio

Diversos estudios misiológicos y psicológicos afirman que los misioneros experimentan un nivel de estrés alto, y experiencias conflictivas debido al tener que adaptarse a una nueva cultura e idioma.

Las sesiones de debriefing son necesarias para que el misionero, en un ambiente seguro, pueda desempacar, simbólicamente, las emociones vividas o reprimidas durante su tiempo de servicio, a manera de una catarsis con alguien que lo acompañe y escuche. Si bien es cierto que la adaptación a la nueva cultura y al nuevo idioma se facilita estando seguro de su llamado, y de quien lo envía a participar en el peregrinaje misionero, no lo exime de vivir momentos de pruebas, desánimo, dudas, como también momentos de esperanza y bendiciones. Estos momentos de alegría y tristeza que son inherentes en el peregrinaje misionero requieren ser expresados para que conclusiones erróneas sean corregidas, sentimientos de enojo o perdidas sean expresados y sanados, para que al final de este proceso su llamado sea renovado y fortalecido.

Las diferentes organizaciones internacionales que prestan ayuda en situaciones de emergencia o desastres naturales, como también el ejército, históricamente han establecido la política de requerir que se ofrezcan sesiones de debriefing a sus miembros. La razón de este requerimiento es porque se asume que es una intervención de carácter preventivo y a la vez terapéutico. Las personas que participan en un proceso de debriefing muestran tener menos probabilidad de ser afectados por el estrés vicario (EV) no resuelto o presentar en el futuro síntomas de un estrés post traumático (EPT).

Por lo expuesto, en el párrafo anterior, diferentes organizaciones misioneras internacionales e iberoamericanas han optado por ofrecer sesiones de debriefing o entrevista personal a misioneros en etapas de retorno, como una buena práctica. A su vez, es válido reconocer que esta práctica, en nuestra región, es aún nueva a pesar de los esfuerzos de capacitación que COMIBAM, a través de su área de Cuidado Integral del Misionero (CIM), ha ofrecido sobre esta práctica en diferentes países.

Diferentes formas de debriefing

En el contexto del trabajo misionero se distinguen algunos tipos de debriefing tales como:

Organizacional – Es el encuentro entre la persona misionera y su director de misión o pastor de su iglesia donde generalmente se dialoga sobre la tarea desempeñada, logros, dificultades, etc. El objetivo es evaluar el aspecto organizacional y el desempeño ministerial para mejorar lo que se requiera.

Personal – El propósito del debriefing personal es facilitar a la persona misionera un espacio seguro, donde se garantice la confidencialidad y donde, en forma cálida, se le anime a contar su historia incluyendo las bendiciones y las dificultades experimentadas. La persona que escucha y acompaña este proceso ayudará al misionero a integrar las memorias que tiene en una forma realista, no excesivamente positiva ni tampoco excesivamente fatalista. En estos momentos es importante destacar los dones de la persona misionera, sus sacrificios, su fe y la presencia de Dios. Cuando el misionero cuenta su historia y se siente escuchado, apoyado y valorado su nivel de ansiedad, dudas, conflictos de fe y sentimientos de emociones conflictivas se aminora en forma considerable. De esta manera el misionero termina dando un significado balanceado a su vivencia y experimentando un sentido de final a lo vivido en la etapa a la que se refirió.

Incidente crítico – Es el debriefing utilizado para procesar un evento específico que en general está relacionado a una experiencia violenta, inesperada y traumática, muy intensa. Por la naturaleza del contenido que muchas veces evoca emociones intensas se hace necesario que este encuentro sea muy estructurado en el que quien está escuchando asuma una posición directiva.

Beneficios específicos del debriefing personal

Existe un clamor constante entre los misioneros iberoamericanos, quienes expresan el deseo de participar en sesiones de debriefing. Lamentablemente los líderes y directores de los departamentos de misiones no cuentan con el tiempo para ofrecer este ministerio, no han sido entrenados para ejercerlo o no perciben sus beneficios. Algunos de los beneficios son:

  • Disminuye la percepción de sentirse diferente.
  • Revitaliza el estado de ánimo de quien se apena al percibir que no se lo escucha o no se le da importancia o que existe incomprensión sobre lo que ha vivido en su peregrinaje misionero.
  • Incrementa el sentido de ser valorizado como agente misionero.
  • Permite que el misionero exprese en un ambiente seguro, cálido y confiable su historia completa, su experiencia de haber vivido en un país diferente al suyo, de tal manera que este momento facilite la reflexión sobre la presencia de Dios en las situaciones difíciles y buenas (paradojas), y experimentar sanidad y renovación en su llamado.
  • Previene el desgaste emocional, espiritual y el retorno prematuro del misionero.

Lo mencionado no nos debe alarmar. Las pruebas y conflictos son parte de la vida diaria de todo cristiano y también del misionero. Es importante no negarlo o ignorarlo sino hablarlo, y al ser escuchado, lograr un mejor entendimiento de los conflictos rezagados desde la perspectiva del Reino y de la misión de Dios. Los misioneros se sienten comprendidos y aceptados cuando sus historias son normalizadas y validadas. Como registra I Pedro 4.12 “Amados, no os sorprendáis del fuego de la prueba que os ha sobrevenido, como si algo extraño os aconteciese. Sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con su alegría”. Si el debriefing permite que el misionero exprese sus alegrías y luchas, le generará cierto factor de resiliencia que le permitirá volver y quedarse más tiempo en su lugar de servicio.

Finalmente se recomienda que el departamento de misiones de cada iglesia facilite la capacitación en debriefing o entrevista personal al misionero de un equipo, por ser una herramienta útil en el ministerio de cuidado del misionero.

El debriefing se da al interior de una buena relación. Y su ejecución es una responsabilidad tanto de la iglesia que envía como de la organización misionera receptora en el campo misionero, teniendo en cuenta las particularidades de la cultura del misionero.